Hola a todos! Esta vez traigo una reseña de un libro precioso, del que había estado pendiente desde el verano pasado más o menos, cuando vi su hermosa portada en inglés mientras indagaba por GoodReads, se las dejaré más abajo, como sea, cuando me enteré que Océano lo traía a la Argentina me puse muy feliz porque realmente cumplió con mis expectativas.
El arte del pastel perfecto
Autor: Sarah VaughanSaga: AutoconclusivoNúmero de páginas: 368Medidas: 23.5 x 15.5 x 2.5 cmSello: MaevaISBN: 9788415893950Sinopsis: Kathleen Eaden fue la imagen de la próspera cadena de supermercados fundada por su marido. Con sus deliciosos dulces y su apariencia de ama de casa perfecta, se convirtió en símbolo de la vida familiar en muchos hogares. Ahora, después de su muerte, la cadena Eaden’s busca a un nuevo representante de la marca a través de un concurso de repostería.Los cinco participantes que pasan a la nal no podrían ser más diferentesentre sí, igual que lo son sus motivaciones para concursar. Tenemos a Jenny, que se enfrenta a su casa vacía ahora que sus hijas son mayores; a Claire, que sacrifi có sus sueños para criar a su hija; a Mike, viudo y padre de dos niños; a Vicki, que lo dejó todo para quedarse en casa con su hijo, y a Karen, que no está dispuesta a mostrar ninguna sura en su apariencia brillante.A medida que avanza la competición, el nivel de exigencia aumenta y los concursantes deberán esmerarse cada vez más y preparar ante las cámaras todo tipo de deliciosas recetas, al tiempo que profundizan en la leyenda de Kathleen Eaden, cuya aura de perfección, descubren, también tenía sus imperfecciones.¿Quién conseguirá ser la nueva imagen de la marca Eaden’s?
RESEÑA:
La sinopsis explica muy bien la idea general del libro: Kathleen Eaden es para nosotros en Latinoamérica lo que sería doña Petrona, o si quieren Julia Child, es decir la ama de casa modelo, que cocinaba todo por y para su familia, en simples palabras perfecta. Con motivo de celebrar su vida se organiza un concurso para encontrar a la nueva señora (o señor) Eaden, alguien que pueda estar a la altura de sus postres y tartas. Esto hará que cinco personas que no pueden ser más diferentes se junten en una competición que no es tan tranquila como se puede pensar.
Las lágrimas se desbordan. Lágrimas por una relación de tres décadas, así como por una adolescente a quien su madre enseñó a cocinar y para quien la comida siempre ha representado amor.
La autora nos presenta a los cinco protagonistas, que cada uno relata un pedacito de un capítulo, desde su punto de vista nos cuentan no solamente cómo es la competencia, que recetas eligen, cuánto practican para ello y por sobre todas las cosas sobre sus vidas y por qué quieren ganar. Por el otro lado cuenta la historia de Kathleen mientras escribe su libro, el que todos los competidores tienen como biblia: 'El arte del pastel perfecto'.
Como leí en una reseña por ahí, este libro no es de cocina, aunque tiene recetas lindas y, obviamente, trata sobre una competencia culinaria, es más que eso, habla sobre las cosas que queremos y las que debemos hacer. Todos saben, bah si leyeron mi reseña de 'Una chef con estrella', saben que a pesar de ser un queso con temas de cocina, los libros sobre esto son mi guilty pleasure.
—Quizá eso sea bueno. —Mike se relaja en el espacio junto a ella; ahora la costura de sus pantalones le roza el muslo—. Pocos de nosotros somos lo que parecemos a primera vista.
Los cinco concursantes son: Vicki, Jenny, Clare, Mike y Karen, cada uno distinto al anterior, que tienen muy pocas cosas en común salvo la dedicación a su familia. Vicki, madre primeriza con un niño pequeño con la necesidad de ser la perfecta madre, esposa y cocinera como le inculcó su propia madre a su manera; Jenny, quien ha vivido su vida para su marido e hijas, ahora que nadie la valora y nadie entiende su pasión por la cocina comienza a entender que nadie la defenderá; Clare, madre soltera cuyo padre de su hija aparece solamente cuando las cosas le van bien pero desaparece en cuanto hay una fea, que intenta darle, por encima de todo, lo mejor para que a su hija no le falte nada; y por último Karen, un personaje que odié pero tiene motivos para ser como es, hiper controladora, demasiado preocupada por las apariencias que la llevan a descuidar a todos los que la quieren. Kathleen es una historia aparte, sus capítulos son pocos pero uno verdaderamente siente empatía por ella, todo lo que le pasa es transmitido en sus palabras.
Todos nos habíamos hecho una idea sobre ella, pero en realidad no la conocíamos en absoluto.
Ustedes se estarán preguntando por qué no es un diez (o cinco estrellas) y fue porque me costó engancharme, tardé bastante en leer también porque no lo quería llevar en la cartera porque, al ser de tapa dura, las chances de que se arruinara eran muy altas, pero me acompañó en los últimos viajes a la facultad. Diría que la primera cuarta parte es muy explicativa, lo que hace la lectura lenta pero que remonta cuando el concurso toma forma, donde se llegan a conocer verdaderamente a los participantes.
Hay muchos motivos para dedicarse a la repostería: para alimentar; para crear; para impresionar; para nutrir; para definirnos; y a veces, todo hay que decirlo, también para ser perfectos. Pero a menudo el hecho de elaborar un postre pretende satisfacer un apetito que se vería mejor recompensado con un simple gesto de amor de un ser querido. Cocinamos para amar y ser amados.
Es un libro muy bonito, para reflexionar un poco sobre cómo ciertas personas afectan nuestra vida y que a veces no conocemos, como perdemos la noción de que los famosos son personas como todos nosotros, que cometen errores y que lo malo no los esquiva (créanme, lo sé, he conocido a gente muy ciega con las celebridades, a ver, cuando puedo manejo la página de Zac Efron). Se lo recomiendo a quienes les guste una novela dulce, no sólo por sus recetas sino por sus personajes.
La verdad es que a pesar de todo lo que te gustó (y me llamó la atención eso, la verdad, no el libro), creo que no va a ser para mí.
ResponderEliminarUn besito!
Hola Sol!
ResponderEliminarEs mi lectura actual y la estoy saboreando lentamente y disfrutando un montón.
No he leído muchos libros que toquen el tema culinario pero cocinar me gusta y me encantan las historias que demuestran la pasión por ello. Como agua para chocolate es uno de mis libros favoritos de la vida y un ejemplo perfecto.
Ahora con éste me estoy llevando una sorpresa hermosa porque es mucho más de lo que me esperaba y me encanta cómo logra la autora diferenciar a los personajes y volverlos tan humanos y reales con sus problemas y su vida cotidiana. Ya veremos qué tal me parece cuando lo termine de leer.
Que andes bien.
Hola Sol! aww suena super bonito. Anto, quien comenta arriba, me dijo que le encantó también. Me encantan las historias dulces así que no lo descarto.
ResponderEliminarMe alegra que lo disfrutaras.
un beso